Cuando obligas a los trabajadores a volver a la oficina, los mejores se van

Cuando obligas a los trabajadores a volver a la oficina, los mejores se van
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Estas últimas semanas, Elon Musk y Vivek Ramaswamy han propuesto eliminar el trabajo en remoto para el 94 % de los trabajadores públicos (empleos federales) en EE. UU.

Según Fortune, esto podría salir muy, muy caro y muestra un precedente que nos puede enseñar unas cuantas cosas a los europeos también. Son datos que llegan de la Universidad de Pittsburgh, donde se ha sugerido que puede traer consecuencias indeseadas, tanto en el ámbito público como en la empresa privada norteamericana.

Si me dices ven, no vengo más

Donald Trump anunció que, en la siguiente legislatura, Musk y Ramaswamy tendrán a su cargo el Departamento de Eficiencia Gubernamental. Elon Musk y Vivek Ramaswamy han propuesto eliminar las opciones de teletrabajo para el 94% de los empleados federales en EE. UU., con la intención de reducir gastos y alentar la renuncia de trabajadores, lo que, según ellos, ahorraría billones al presupuesto federal.

Sin embargo, un informe de la Universidad de Pittsburgh ha analizado el impacto del RTO (las políticas de volver a la oficina) en 54 grandes empresas de EE. UU. que implementaron estas políticas entre 2020 y 2023. Los resultados no se alinean mucho con las ideas de Musk y Ramaswamy.

Así, el profesor Mark Ma, encontró que las empresas de tecnología y finanzas que implementaron políticas de retorno a la oficina perdieron a sus empleados más cualificados y experimentaron dificultades para cubrir esas vacantes.

De las 54 empresas del S&P 500 que impusieron mandatos RTO entre 2020 y 2023, se han analizado la friolera de 3 millones de perfiles de LinkedIn, observando un aumento del 14 % en la tasa de salidas tras estas políticas. Las bajas afectaron especialmente a mujeres, mandos intermedios y altos, y profesionales con mayor cualificación.

Retención del talento

De la teoría a la práctica parece que las políticas de retorno al trabajo presencial (RTO) están dificultando la retención del talento. Algunos ejemplos claros se encuentran en el seno de la propia Tesla, de Elon Musk, o Starbucks, donde Brian Niccol defiende las medidas como una forma de reforzar la cultura corporativa en la empresa.

En cualquier caso, no está claro que refuerce ni la cultura corporativa ni la cohesión de los equipos, más bien todo lo contrario. Solo en Amazon, el 70 % de los trabajadores consideró renunciar tras implementar políticas de retorno a la oficina..

En España, donde la flexibilidad laboral está cada vez más demandada y afianzada, este fenómeno puede ser una llamada de atención. Aquí también muchas empresas defienden el modelo presencial como una forma de mejorar la colaboración y la innovación, pero la realidad es que los empleados con más opciones en el mercado suelen buscar condiciones que se adapten mejor a sus necesidades.

Además de perder trabajadores...

Las consecuencias del RTO no se limitan a perder trabajadores formados, sino a volver a cubrir esas vacantes, formar a los empleados y dar el tiempo para que estos se adapten al ecosistema laboral.

Así, según Indeed, la formación inicial de un trabajador puede suponer más de 1.000 euros y varias semanas de adaptación. Esto supone una inversión que, en muchos casos, no garantiza la estabilidad del personal.

Todo indica que obligar a los trabajadores a volver a la oficina es costoso y puede llegar a ser contraproducente, por lo que el reto actual es encontrar un equilibrio —o una paz tensa, entre defensores y detractores— por ahora.

Las razones de esta decisión, además, no siempre están claras: a menudo, parecen caer en ideas obsoletas, según apuntaba el experto Gleb Tsipurski. Quizá, el próximo año, tocará analizar y aplicar enseñanzas para las que los cargos directivos e intermedios todavía son reacios. En el caso de Tsipurski,  señala que el trabajo en remoto puede ser el chivo expiatorio de otras malas decisiones empresariales.

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