¿Es posible reinventarse en mitad de una pandemia?

¿Es posible reinventarse en mitad de una pandemia?
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Durante años hemos escuchado que crisis era igual a oportunidad. En octubre de 2020 y en mitad del segundo estado de alarma, puede resultar osado pensar en reinventarse. ¿Es posible? ¿Existen ganas de iniciar un proyecto empresarial?

La respuesta es sencilla: sí. Obviamente será más sencillo para negocios que ya estaban presentes en internet salir adelante, pero el ser humano es extraordinario y ha sido capaz de salir adelante en momentos más críticos que el actual.

Algo más que una palabra bonita, 'reinventarse' es una necesidad para las empresas

Recuperación, reactivación y resiliencia forman parte de los planes estratégicos de urgencia de todo tipo empresas. Pymes y autónomos, grandes organizaciones que están abriéndose camino en estos momentos. Llegó la hora de reinventarse porque es la única salida.

En los peores momentos de la pandemia, muchas fábricas comenzaron a fabricar productos relacionados con la higiene, por poner un ejemplo. Paneles de metacrilato eran fabricadas por pymes que se dedicaban a otros menesteres un par de meses antes.

Otras, no pueden o no desean dar ese paso y siguen en un ERTE. Siendo realistas, no siempre es posible encontrar una alternativa para mantener la persiana abierta.

Empresas que durante el confinamiento aprovecharon la oportunidad para reinventarse

Es el caso de algunos supermercados pequeños. Contaron con la ayuda de repartidores y así lograron aumentar sus ventas cuando a todos nos daba reparo acudir a los puntos de venta.

Las tiendas de barrio hicieron algo similar, pero siendo ellos o parte de su escaso personal, el que llevaba la compra al vecindario. Algunos hoteles, han apostado por ceder su espacio por una cantidad no muy elevada a startups o profesionales independientes que deseen teletrabajar en un lugar que no sea su casa.

Ni sencillo, ni se logra de la noche al día. Pero, el adaptarse a las situaciones cambiantes es lo que distingue a una persona creativa de otra que todo lo ve negro. Son tiempos difíciles y los ERTE están ahí, las restricciones, y sobre todo el virus.

Pero en nuestras manos está (si es posible) emplear el pensamiento paralelo y dar la vuelta a la idea de negocio que teníamos entre manos para adaptarlo a este contexto.

Imagen|Fotografierende

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