Javier Ruiz
El Ministerio de Inclusión y Seguridad Social ha dado un paso atrás en su plan de subida de cuotas para los trabajadores por cuenta propia. Tras la polémica generada por el borrador de tablas 2026-2028 que analizamos en este blog la semana pasada, el Gobierno plantea ahora congelar las cuotas de los autónomos con ingresos más bajos, una decisión que afectará especialmente a quienes declaran rendimientos inferiores a 1.166 euros mensuales.
La medida llega en plena negociación con las asociaciones de autónomos y busca reducir la tensión tras la negativa de ATA a participar en las reuniones de la mesa de diálogo. Los tramos medios y altos, sin embargo, sí sufrirán ligeros incrementos de entre 2,5 y 14,75 euros al mes; sin embargo, un gran porcentaje de los trabajadores por cuenta propia mantendrán sus cuotas el próximo año.
Qué propone ahora la Seguridad Social
El nuevo planteamiento del Ministerio busca preservar el equilibrio financiero del sistema sin cargar sobre los autónomos con menos ingresos. De este modo, se congelarán las cuotas de los tres primeros tramos —hasta 1.166 €/mes de rendimientos netos— y se aplicarán subidas moderadas del 1 % al 2,5 % en los niveles superiores.
Este es un giro de ciento ochenta grados frente al borrador inicial, que preveía incrementos de hasta 35 % en algunos casos en los próximos tres años. La propuesta actual se limitaría al primer año del ciclo (2026) y no incluye por ahora una revisión automática para los ejercicios siguientes.
El cambio responde al malestar generalizado entre los trabajadores por cuenta propia tras conocerse las previsiones de subida. Organizaciones como ATA y UPTA reclamaron una revisión inmediata del modelo, advirtiendo de que los tramos medios soportarían la mayor parte del esfuerzo.
La congelación de las cuotas busca enviar una señal de estabilidad al colectivo de trabajadores autónomos antes de cerrar el calendario presupuestario. En paralelo, la Seguridad Social mantiene la intención de evaluar cada año el sistema de cotización por ingresos reales, implantado en 2023 y que afecta ya a 3,3 millones de autónomos.
Alivio para las rentas bajas
Para los autónomos con rentas bajas, la congelación supondrá un alivio inmediato, ya que no verán aumentar su cuota mensual en 2026. Sin embargo, para quienes superen los 2.000 o 3.000 euros de rendimientos, la subida se traducirá en unos pocos euros más al mes.
El problema, según advierten fuentes consultadas por RTVE, es que la falta de un marco trianual genera incertidumbre sobre lo que ocurrirá a partir de 2027. Las pymes y microempresas con varios autónomos societarios también deberán estar atentas, ya que la medida podría no incluir aún ajustes específicos para su régimen. De igual modo, se echa en falta un plan claro más allá de los ajustes para cada año fiscal.
Negociación abierta
La nueva tabla de cuotas forma parte de un documento preliminar que el Ministerio ha remitido a sindicatos y patronal. Su aprobación dependerá del consenso en la mesa de diálogo social, donde ATA y UPTA han pedido además revisar el acceso al cese de actividad y los errores de regularización de 2023.
Si el acuerdo se cierra antes de final de año, el nuevo marco se aplicaría desde el 1 de enero de 2026. La medida se percibe como un intento del Gobierno por reconstruir puentes con el colectivo, tras meses de tensión y caídas en la confianza de los autónomos.
Foto: Flickr
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