¿Puedo pedirle a mi empresa que me aplique menos retenciones en el IRPF en mi nómina?

¿Puedo pedirle a mi empresa que me aplique menos retenciones en el IRPF en mi nómina?
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Entre las dudas más habituales de los trabajadores en relación a sus retenciones por IRPF está la posibilidad de aplicar unas retenciones menores en su nómina. Se trata de una duda razonable, ya que muchos contribuyentes prefieren recibir algo más de dinero líquido todos los meses que recibirlo todo de golpe en el momento de presentar su declaración de la renta como parte de la devolución de la cuota diferencial de la declaración de la renta. Entonces, ¿puede un trabajador pedirle a su empresa que le aplique menos retenciones?

Pues bien, la respuesta es no. La legislación establece las retenciones que cada empresa debe aplicar en función de la situación particular del contribuyente en cada momento, y que pueden cambiar si cambian sus circunstancias. Para ello, la Agencia Tributaria pone a disposición de los ciudadanos una herramienta para realizar el cálculo de estas retenciones.

Ahora bien, en determinadas circunstancias, la empresa puede aplicar una retención menor si así se lo comunica su trabajador. El artículo 86 del Real Decreto 439/2007, por el que se aprueba el Reglamento del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas, establece que un contribuyente podrá pedir a su empleador una reducción de dos enteros en su tipo de retención si la cuantía total de sus retribuciones es inferior a 33.007,2 euros y destina cantidades a la adquisición y rehabilitación de su vivienda habitual utilizando financiación ajena y con derecho a deducción por inversión en vivienda habitual.

En algunos contratos temporales, no obstante, se aplica la retención mínima del 2%. Esta circunstancia se debe a que, en algunos contratos de pocos meses, la Agencia Tributaria entiende que el contribuyente no va a llegar al mínimo personal y familiar y, por tanto, no está obligado a declarar. Sin embargo, si la empresa renueva el contrato, lo más probable es que las retenciones suban de golpe, y que el contribuyente tenga que regularizar esta situación en la declaración de la renta del año siguiente.

Ahora bien, el contribuyente puede pedirle a su empresa que le suba las retenciones practicadas. Esto puede ser útil y recomendable cuando se trabaja para dos empresas diferentes y hay un salto de un tramo a otro. Esta situación se regularizará en la declaración de la renta del año siguiente, pero puede provocar alguna sorpresa si no se ha planificado de forma adecuada.

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Imagen | IMS68

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