La ley Antifraude ha puesto su ojo de Sauron en la vigilancia de las operaciones que se pagan en efectivo. Y han limitado las cantidades que cualquier empresas o negocio puede aceptar en esta forma de pago a 1.000 euros. Quieren controlar de esta manera la posibilidad de eludir impuestos al no registrar determinadas operaciones. Pero ¿puedo aceptar pagos en efectivo de más de 1.000 euros en mi negocio? Solo en el caso de no residentes en España.
En el caso de que la persona que va a efectuar el pago no disponga de residencia fiscal en España se pueden aceptar pagos de hasta 10.000 euros sin sanción, siempre que el pago se realice como particular, no como empresa o profesional. Y esto es bastante importante para muchos negocios turísticos cuyos principales clientes son extranjeros que no hacen un uso tan extenso del pago con medios electrónicos.
¿Qué ocurre si hemos aceptado pagos de más de 1.000 euros en efectivo? Pues que podemos ser sancionados con un 25% de la base de la sanción. Es decir, si hemos aceptado un pago de 2.000 euros, la sanción impuesta sería de 500 euros.
Claro que luego se puede producir una reducción de las sanciones por pronto pago, con un 40% de la cuantía o reducción por conformidad de un 30%. Hacienda busca de esta manera agilizar los pagos y que el administrado no plantee recursos o, peor todavía, vaya a los tribunales si no está conforme.
Lo cierto es que son los negocios que más manejan efectivo donde Hacienda tiene una especial vigilancia este verano. Todas aquellas actividades como restauración, comercio al por menor, ocio nocturno, por ejemplo, son las que más posibilidades tienen de sufrir una inspección para constatar que todo lo están haciendo correctamente.