El salario productivo

El salario productivo
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El carácter español es fuente inagotable de curiosas paradojas. Por ejemplo, la mayoría de los españoles consideran el modelo retributivo de los funcionarios como obsoleto, injusto e improductivo, porque se basa en dos premisas: categoría y antigüedad. Sin embargo, cuando nosotros mismos actuamos como empresarios, aplicamos estos criterios tan ineficientes.

No paso por alto la existencia de los convenios colectivos, pero realmente estos no dejan de actuar como acuerdos marco que luego las empresas, por regla general, mejoran. Entiendo que por comodidad del empresario o del responsable de recursos humanos, aplicar esta política salarial tenga su validez pero, desde luego, es poco práctica.

Considero que una política salarial efectiva debe armonizar la austeridad con la promoción de la productividad del empleado. Hasta el día de hoy no hay mejor herramienta para llevarlo a efecto que la aplicación de bonus o retribuciones variables. Desde luego, aplicar esos porcentajes ridículos del 3% que por regla general se ofrecen a todos aquellos que no pertenecen a departamentos de ventas, subiendo en estos, al 10 ó el 15%. Estos porcentajes no son motivación suficiente motivación como para que los empleados deseen incrementar su productividad.

Para que sea efectiva, hay que definir las herramientas para medir la productividad y evaluar los objetivos propuestos y en base a ello calcular la retribución. La retribución variable debe ir adquiriendo mayor peso en los salarios de todo el personal de una empresa. La distribución que por norma general se viene utilizando es condicionar una parte a la evolución de la empresa, que suele ser inferior al 25% del total y el resto, mínimo 75%, por el desempeño personal del empleado.

Los métodos retributivos en las empresas deben de empezar a modificarse gradualmente. Para las pymes es un factor de competitividad fundamental y es esencial estimular a los trabajadores a participar en este sistema retributivo, fijo y variable. Por tanto, no consiste en interpretarlo como una ventaja para la empresa si no un beneficio para todo el conjunto, ya que quien desempeña su función mayor retribución recibirá por su trabajo.

Imagen | lesum En Pymes y Autónomos | La acción desmotivadora de la igualdad de salarios, La crisis aumenta la productividad en España

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