Apple acaba de anunciar su nuevo servicio en la nube, su servicio iCloud. Y si bien es cierto, que los servicios en la nube ya hace bastante tiempo que están entre nosotros y que poco a poco van haciéndose un lugar entre nosotros, también lo es, que este anuncio puede ser el espaldarazo definitivo a esta implementación, y a mi entender, ello trae grandes beneficios, también a las empresas.
No entiendo de forma técnica sobre tecnología, no entiendo aún muchos de los conceptos que están llegando al mercado. Pero lo que si entiendo, veo cada día y compruebo en mis propias carnes (que son muchas) es que como mínimo a mí, como profesional, el trabajar y desarrollarme en la nube me ayuda inmensamente en mi trabajo.
Y es que no estamos hablando ya de pequeñas aplicaciones o servicios que se pueden tener en la nube, estamos hablando de un cambio de paradigma donde “todo” será en la nube, y los aparatitos simplemente serán (casi ya son) simples ventanas de entrada a ese “todo”.
A mí, como profesional, como digo, los servicios en la nube cada día me permiten trabajar con mayor movilidad, con mayor conectividad con todos mis clientes y con mayor agilidad y comodidad en todos los procesos. A la vez que me permiten cada vez tener una estructura más fuerte y segura, pero cada vez más laxa y moldeable. Y si a mí como profesional independiente me lo permite, convencido estoy que eso es así en la mayoría de profesionales y empresas, ¿nos vamos a la nube?
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