El Día Internacional del Jefe es una fecha con una historia peculiar. Se celebra el 16 de octubre porque Patricia Bays Haroski, ese día olvidó el cumpleaños de su jefe que resultaba ser también su padre.
Por otro lado, el 58% de los españoles cree que tienen un mal jefe. Al contrario que Patricia Bays no estarían de acuerdo en que se festeje ese día.
Seis de cada diez españoles creen que tienen un mal jefe: Patricia Bays, no
La joven Patricia trabajaba como secretaria en la State Farm Insurance Company, en Deerfield, Illinois. Pero se encontraba tan saturada de trabajo que borró de su mente el cumpleaños de su jefe y a la vez padre.
Para compensar semejante descuido, al día siguiente registró el Día Internacional del Jefe, en la sede de la Cámara de Comercio de los Estados Unidos que se encontraba en su ciudad y cuatro años más tarde, el gobernador de Illinois, Otto Kerner, aprobó su petición y desde entonces se celebra este día.
Bien, Patricia vive en Estados Unidos, su padre es su jefe, pero esa combinación no siempre es sinónimo de éxito. Sin duda, él es un buen líder. ¿Qué ocurre en España según El Estudio de Tendencias en
Recursos Humanos 2023”, elaborado por Sodexo? elaborado por Sodexo?
Tan simple como que actualmente el estilo de liderazgo de las empresas no está bien valorado por gran parte de los empleados.
Un buen liderazgo debe contar con la empatía y la comunicación como pilares
El 59% de los empleados considera un cambio de líder o de estilo de
liderazgo como uno de los factores que más les influyen para permanecer en su empresa actual.
Estos números varían dependiendo de cada generación ya que los trabajadores de más de 55 años son los que más valoran un buen liderazgo con un 88,5%, mientras que los empleados entre 35 y 44 años son los que menos importancia le dan.
Ante este reto, las empresas han empezado a proponer la formación en habilidades de liderazgo como una de sus prioridades en 2023
La formación en liderazgo como prioridad para las empresas
Dado que los aspectos más valorados en un líder son una buena comunicación con su equipo (76,5%), la empatía (74%), que sea accesible y transparente (71,7%) y que sepa delegar demostrando confianza (69%), es importante que las empresas apuesten por una formación que mejore los soft skills (habilidades sociales) de los jefes.
Porque un liderazgo sensible además de buscar alcanzar los
objetivos empresariales, también vela por el bienestar de los empleados y, por lo tanto, asegura su motivación y compromiso.
“Un buen líder, además de dirigir a su equipo para alcanzar los objetivos deseados, también debe cumplir el rol de motivar y guiar a sus empleados. Si bien aún hay un camino por recorrer, la formación para un liderazgo sensible puede ayudar a fortalecer las relaciones dentro de la empresa y así tener empleados comprometidos con ella” afirma Miriam Martín, directora de Marketing y Comunicación de Sodexo Beneficios e Incentivos.