La mayoría de las personas se dan por satisfechas con un empleo con un salario razonable, un ambiente laboral cómodo, y en algunos casos, que les permita un desarrollo profesional. Otros, sin embargo, no se conforman y estas condiciones les resultan insuficientes y apuestan por realizarse personal y profesionalmente mediante la búsqueda de lo que podríamos llamar la felicidad.
A este perfil de personas se les conoce como “happyshifters“ y realmente es un plantemiento más que justificado teniendo en cuenta la cantidad de tiempo que absorbe el trabajo en nuestras vidas, sentirse a gusto y motivado, pasa por ser un camino para poder alcanzar la felicidad, y porqué no, dar sentido a la vida.
Lo que caracteriza a un happyshifter es que en algún momento se ha cuestionado lo que hace en su trabajo, de qué forma y en qué condiciones, planteándose si realmente ese ámbito laboral le hace feliz, o si ir a trabajar solo es parte de la rutina. Lo diferencial del “happyshifter” es su capacidad para actuar, decidiendo cambiar de empresa o simplemente decidirse por crear la suya propia, con el propósito, en definitiva, de ser feliz.
Por tanto, los happyshifters tienen unas cualidades personales específicas, como son tener una personalidad emprendedora, optimista y, en absoluto, conformistas. Se conocen muy bien a sí mismos, y han tenido la capacidad de elegir objetivos a largo plazo, sacrificando tiempo e ingresos económicos, porque entienden que no siempre se parte de las mejores condiciones y que se debe tener paciencia para poder progresar y así, lograr la felicidad plena. Por lo tanto, son personas que reinventan su futuro, protagonistas de sus vidas, que toman el control de ésta y no culpan a otros de sus problemas personales y laborales.
Vinculado a estas tendencia están otras de las que antes he hablado como es el “downshifting”, que en definitiva, son propuestas que ayudan a definir elplanteamiento que tenemos hacia el trabajo, es decir, como un medio o un fin en nuestras vidas.
Vía | Trabajando.com
Imagen | David Masters
En Pymes y Autónomos | La rentabilidad de la felicidad, “Downshifting” un motivo para emprender