Hace unos días publiqué un post en referencia a una entrevista al Ministro de Industria en la que resaltaba la valiosísima aportación de los emprendedores, y por ende, de las pymes como motores de la recuperación económica. Han coincidido estos días esta entrevista con un par de noticias o comentarios que, lejos de confirmar las palabras del Ministro, parecen que van en sentido contrario y que los políticoa, o no saben o no les interesa lo que necesitan las pymes.
Una de ellas es la intención del Banco de España de aumentar la exigencias a las entidades de crédito, que tendrán provisionar los créditos morosos en un plazo sensiblemente más reducido que el actual, y que ya se trató en otro post ayer, eso reducirá todavía más las posibilidades de acceso al crédito de las pymes. Por otro lado en el blog de Jaime Estévez leía estos días pasados la situación de un empresario al que Hacienda le había embargado por un IVA que no había pagado y que correspondía a una factura que no había cobrado de una Administración Pública.
Desde luego estas situaciones no van a ayudar al motor de la recuperación. Tampoco la tan cacareada Ley de Morosidad, que seguramente se aplicará con enorme rigidez en los casos de las empresas privadas, pero será de dudosa efectividad en los Organismos Públicos que han ahogado y lo siguen haciendo a miles de pymes en nuestro país. La subida del IVA, tampoco es de gran ayuda, sobre todo teniendo en cuenta que una gran parte de las empresas absorverán esta subida rebajando su margen comercial, y las que no lo hagan corren el riesgo de perder ventas.
Lo que realmente necesitarían las pymes es disponer de una marco regulatorio que favoreciera su actividad. No hablo de ayudas directas, ni de subvenciones o de programas de financiación "mas efectistas que efectivos", no es labor de ningún Gobierno ni ocuparse de la creación de empleo ni aumentar de manera ficticia la actividad empresarial a base de subsidios. Su trabajo consiste en legislar y crear ese entorno favorable para el crecimiento de la actividad empresarial, fomentar la dinámica económica y no asfixiar al único elemento, actualmente, capaz de generar riqueza y empleo.
Ayer, en un artículo de Europa Press se hacía referencia a varias propuestas realizadas por el director del Instituto de Estudios Económicos (IEE), Juan Iranzo, por el presidente de Analistas Financieros Internacionales (AFI), Emilio Ontiveros o por el director del Gabinete de Coyuntura y Estadística de la Fundación de Cajas de Ahorro (Funcas), Ángel Laborda, en ese sentido dinamizador de la economía. Algunas de esas medidas, junto con otras realmente efectivas de acceso al crédito a las pymes pueden ser las claves para ayudar a salir de una situación, para algunos, desesperada.
Es el momento de apostar, realmente, por las pymes como motor económico. Si, efectivamente, es cierto que se cree que las pymes han de ser las que pongan en marcha la recuperación, se han de tomar medidas que faciliten su actividad, que favorezcan la creación de nuevas empresas y, con ello, de nuevos puestos de trabajo. Si no se hace nada en este sentido, podemos esperar a que, cuando se pase el efecto veraniego, las pymes queden ahogadas definitivamente y "gripemos" el motor antes de arrancarlo.
En Pymes y Autónomos | Las deudas de los Ayuntamientos. Un caso real Imagen | aeruginosa