Espacio Workforce Pro

Seguro que al decir esto no estoy descubriendo nada nuevo, pero una impresora mal gestionada puede llegar a ser una auténtica sangría de dinero para cualquier empresa. Afortunadamente la gran mayoría de impresoras tienen sistemas de ahorro energético que contribuyen a minimizar este problema, la serie WorkForce Pro de Epson no es menos. Es necesario conocer al dedillo nuestras opciones y saber configurarlas adecuadamente.

En la impresora que vamos a tener en nuestra oficina es conveniente tener configurado el sistema de entrada en reposo cuando esta esté inactiva. Contribuirá a ahorrar algo que no está precisamente barato hoy en día, la electricidad. Otro punto a tener muy en cuenta (tal vez más que la electricidad) son los consumibles que necesita la impresora, ya sea papel, tinta o toner.

A la hora de imprimir un documento en borrador lo que priman son los criterios de rapidez, economía del coste por página y similares. Sin embargo, cuando lo que cuenta es la calidad tenemos que apostar por un criterio distinto. Entonces es cuando las impresoras de tinta dan lo mejor de si mismas. Hoy vamos a comparar las impresoras inkjet con las láser en este aspecto.

La ventaja de la gama WorkForce Pro de Epson es que admite cartuchos XL y XXL de gran capacidad que rebajan el coste por página respecto a una impresora doméstica y lo acercan al uso del tóner. Además debemos tener en cuenta la rapidez a la hora de imprimir, donde las impresoras de tinta son más ágiles que las impresoras láser.

Si tienes una impresora Epson y dispones de un Smartphone o un Tablet, desde la compañía japonesa nos ofrecen una herramienta muy sencilla en la punta de nuestros dedos que nos facilitará y complementará las tareas de impresión en nuestro día a día. Esta aplicación, disponible tanto para iOS como para Android, nos dará muchas posibilidades a la hora de interactuar con nuestra impresora.

Los actuales teléfonos inteligentes tienen muchas funcionalidades y configurar iPrint solo nos llevará unos segundos. Esta aplicación gratuíta, si no la tienes ya, está disponible para su descarga tanto en la App Store de Apple para su iPhone o iPad y en el Google Play para cualquier teléfono o tableta con el sistema operativo Android. Solo tendremos que acceder a cualquiera de estas tiendas desde nuestro dispositivo móvil y descargarnos la aplicación que se instalará automáticamente.

Ya hemos visto como desembalar y poner en marcha vuestra impresora Epson WorkForce Pro. Pero ahora es el momento de la instalación y configuración del software de impresión. Para ello, junto con los manuales de impresión tendremos disponible un CD que hará que nuestra instalación, tanto en sistemas Microsoft como Mac sea sencillo. Vamos a ver cómo configurar el software de impresión de WorkForce Pro.

Lo primero que debemos ver es cómo vamos a conectar la impresora a uno de los equipos. Esto podemos hacerlo de dos maneras, ya sea conectando la impresora a través de un cable USB al ordenador o mediante un cable de red en toda la gama WorkForce Pro. Aunque disponga de WiFi, para esta primera configuración os recomiendo uno de estos dos métodos. La conexión mediante USB se realiza cuando sólo la va a utilizar un equipo, quedando la conexión de red como la mejor opción cuando la impresora es compartida.

Tras haber comentado las principales características de las impresoras de la gama WorkForce Pro de Epson, hoy vamos a explicar cómo desembalar y poner en marcha una impresora WorkForce Pro de Epson, lo que se conoce como unboxing por asimilación del término inglés.

En este caso lo vamos a realizar con una Epson WorkForce Pro WP-4525 DNF, que la marca nos ha prestado, para realizar todas las pruebas durante esta serie de artículos del Espacio WorkForce Pro. Lo primero que llama la atención es la dimensión de la caja en la que viene embalada, un tamaño más que generoso, que complicaría, para que nos hagamos una idea, su traslado en un vehículo que no tenga cinco puertas.

Cuando hablamos de ahorros en la impresión siempre se suele tomar como referencia el coste por copia. Se miden sobre todo los costes de los reciclables de la impresora. Una de las cuestiones que nos permiten ahorrar a la hora de ajustar estos costes por copia es la posibilidad de imprimir a doble cara. Y lo cierto es que tras estar realizando distintas pruebas la impresión a dos caras es fácil y simple con WorkForcePro.

Para aquellos que no estén acostumbrados a disponer de esta funcionalidad en la impresora, supondrá un antes y un después. Hasta ahora el proceso habitual cuando se quiere imprimir a dos caras consiste en imprimir primero las páginas impares, recoger las hojas, volver a colocarlas en la bandeja e imprimir las pares. Con la gama WorkForcePro se realiza todo el proceso de forma automática y de forma tan sencilla como seleccionar un ítem en las opciones de impresión.

Tras el repaso que hicimos el otro día a las alternativas que tenemos en las empresas para elegir una impresora, hoy vamos a ofrecer un repaso a las características de la gama de impresoras WorkForce Pro de Epson. Tenemos disponibles desde impresoras sencillas a multifunción realmente completas a la hora de facilitar varias tareas desde la misma máquina, desde el envío de fax hasta el escáner o la fotocopia de documentos.

Entre las características de la gama más destacadas podemos citar la velocidad de impresión, el coste por página de hasta un 50% menos que las impresoras láser multifunción equivalentes o el ahorro energético que suponen dichas impresoras, de hasta un 80% respecto a las impresoras láser. Además, a la hora de evaluar los costes debemos tener en cuenta que el único consumible que necesitaremos será el cartucho de tinta, fácil de cambiar y de reciclar.

Llegada la hora de hacerse con una impresora para nuestra oficina, hay que tener bien claro las necesidades que tenemos para conseguir acertar lo mejor posible con la elección. Antes de ponernos a elucubrar sobre que elegir, vamos a hacer un pequeño repaso de las posibilidades que tenemos, es decir, que tipo de impresoras existen. Las podríamos dividir a grandes rasgos en cinco grupos básicos.

Las impresoras de inyección de tinta, las impresoras multifunción, las impresoras láser, los plotter y las impresoras matriciales (si, todavía se siguen fabricando y usando en muchos ámbitos laborales). Explicadas grosso modo, las impresoras de inyección de tinta poseen cuatro cartuchos de tinta (valga la redundancia), negro, cian, magenta y amarillo. Las multifunción permiten además de imprimir, escanear, fotocopiar o envíar faxes.

Las impresoras láser consiguen imprimir mediante la radiación láser de la imagen en un toner que transfiere la imagen al papel por contacto. Los plotter, que también inyectan tinta, pero suelen imprimir sobre un rollo de papel (no folios) generando impresiones del tamaño que se necesite. Y las matriciales, que imprimen mediante agujas golpeando una cinta con tinta.

Cada entorno de trabajo es un mundo, permitidme comenzar con esta afirmación. Todo depende de las posibilidades que tengamos a nuestro alcance y a partir de ahí podemos empezar a discernir como intentar optimizar al máximo los recursos de los que disponemos. Antes incluso de enumerar las posibilidades de las que disponemos, es muy conveniente calibrar los diferentes tipos de usuario que van a poder acceder a la impresora o impresoras que tengamos en nuestro entorno de trabajo.

Cada usuario es un auténtico mundo, y si has tenido la suerte (o la desgracia) de trabajar en entornos con muchos usuarios (permitidme ser tan aséptico) sabrás que no todos tienen los mismos conocimientos ni las mismas aptitudes para con los equipos informáticos o impresoras. Una impresora mal usada puede ser una auténtica sangría de dinero.

Lejos quedan ya los días en los que teníamos que tener nuestra impresora matricial colgada de un único equipo y teníamos que "pedir la vez" para imprimir un documento. Ahora las impresoras van conectadas a la red local, compartiendo un mismo grupo de trabajo y comportándose como un equipo en si mismo siendo capaz de recibir peticiones de impresión dentro de cualquier otro ordenador conectado a su misma red.