Una de las cuestiones que pueden acabar por decidir a una empresa a la hora de elegir un teléfono móvil es la seguridad que podemos tener con estos terminales. En este sentido BlackBerry ha sido la empresa que más ha pensado en las empresas. Ni Apple ni Android ofrecen soluciones especialmente pensadas para estos entornos. Pero quedan los fabricantes y aquí está SAFE, la apuesta de Samsung para ganar cuota de mercado en las empresas.
SAFE (Samsung Approved for Enterprise)es una característica que está presente en los terminales de gama alta de la compañía, de momento el Samsung Galaxy III y el Note, así como en las tablet Galaxy Tab. Se trata de facilitar a los departamentos de sistemas la aplicación de políticas corporativas y la gestión remota de los terminales.
Para ello cuenta con tres herramientas fundamentales como son el MDM (Mobile Device Management), las VPN y el cifrado de los datos. Las empresas podrán borrar datos en caso de extravío o robo del terminal además de gestionar cuestiones como el uso de BlueThooth, WiFi o la cámara. Pero lo más importante es que se pueden controlar las aplicaciones que tiene el dispositivo instaladas e instalar y desinstalar de forma remota.
Además este sistema será compatible con el resto de medidas que muchas organizaciones ya están aplicando como las de AirWatch, Juniper Networks o Sysbase. También es compatible con el ActiveSync de Microsoft, lo que nos permitirá sincronizar contactos, calendarios, notificaciones o correo electrónico.
En lo que respecta a la seguridad de los datos incorpora cifrado AES-256, y todo ello sin afectar al rendimiento del equipo. En definitiva se trata de un paso adelante de la compañía para hacer que los terminales de gama alta, que son los favoritos de los ejecutivos y directivos de la empresa, sean la opción elegida por los departamentos IT.
Es un buena idea incorporar este tipo de mecanismos a los terminales Android, que no se han distinguido precisamente por su seguridad, como una forma de atraer a las empresas. De todas formas no me parece de recibo que terminales de gama alta que en ocasiones superan los 500 euros, ya sean Android o no, no incorporen las medidas mínimas de seguridad y haya que acudir a terceros para implementarlas.
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