El pasado mes de diciembre el Pleno del Congreso de los Diputados aprobó la Ley de impulso de la factura electrónica y junto a ella la se creará también un registro contable de facturas en el sector público que entró en vigor una vez publicado en el BOE del día 28 de diciembre de 2013 (PDF).
El registro contable permitirá que las facturas no queden ocultas en los cajones. Con un control informatizado y sistemático de las facturas será visible en todo momento el grado de morosidad de cada administración, el periodo medio de pagos que tienen y en todo caso la necesidad de aplicar los mecanismos de la Ley de Estabilidad Presupuestaria y Sostenibilidad Financiera.
Para la pyme pretende ser una garantía para agilizar los procedimientos de pago. Además incluye medidas dirigidas a mejorar la protección de los proveedores, donde lo más significativo es la obligación de presentación en un registro administrativo de las facturas expedidas por los servicios que presten o bienes que entreguen a una Administración Pública así como el impulso del uso de la factura electrónica en el sector público.
La regulación de un nuevo procedimiento de tramitación de facturas ha entrado en vigor el 1 de enero de 2014. Como todas la facturas electrónicas, todas las facturas tendrán formato estructurado, todavía por concretar, y estarán firmadas electrónicamente.
Para las pymes debe suponer hoy en día más una ventaja que un inconveniente, ya que quien más y quien menos tendrá los mecanismos necesarios para crear sus facturas electrónicas. Para los autónomos puede ser mayor inconveniente, ya que no todos tienen firma electrónica o capacidad para emitir facturas en este formato. En todo caso debemos darlo por bueno si con ello se acortan los tiempos de pago para las empresas que trabajan para la administración.
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