Hace unos día nuestro compañero Pablo Herrero de Pymes y Autónomos hacía un interesante ejercicio de análisis de lo que él llamaba la tiranía del informático y lo argumentaba sobre dos puntos: la confusión de tareas entre el desarrollo de aplicaciones y su mantenimiento y por otro lado la falta de profesionalidad de algunas personas que asumen estas funciones. Acababa comentando como el informático puede llegar a ser un cuello de botella en el proceso de toma de decisiones de la empresa.
Tras ello proponía una serie de puntos para evitar los males del informático en la empresa, que iban desde formar a usuarios normales para que asumieran el día a día de las pequeñas tareas hasta contratar bajo demanda los servicios del informático cuando lo necesites. Hasta aquí creo que no le falta razón, pero bajo mi punto de vista él realiza su análisis partiendo de la premisa de una empresa tecnológica con usuarios con una buena base informática y responsabilidad que no se corresponde con la mayor parte de las pymes españolas.
Por eso voy a salir en defensa del sector y vamos a ver si hacemos un birdie…que seguro le gusta a Pablo.
- En primer lugar si un empresario deja que el informático determine cuando se lleva a cabo un proceso, es el empresario el que incurre en una mala práxis. Un informático siempre será una parte en la toma de decisiones que afecten a dicha área, pero nunca debe tener la última palabra. Debe limitarse a emitir un informe técnico con los problemas que pueden aparecer con el cambio y sus beneficios.
- En segundo lugar, un empresario que mantiene un recurso ocioso está perdiendo dinero, ya sea un informático o un comercial. Dado el nivel de formación tecnológica de la empresa y el usuario medio español, el técnico informático debería estar impartiendo cursos de formación individualizados de forma casi constante a los distintos usuarios. Nada de algo casual, sino una cuestión organizada y sistemática. Una buena formación de nuestros trabajadores puede ahorrarnos muchos disgustos y muchas horas de trabajo por los problemas que han podido ocasionar al abrir el archivo que les han enviado por correo…
- En tercer lugar, el técnico informático debería estar en contacto con el departamento de compras cuando se realice la adquisición de equipos y debería formar parte de la toma de decisiones. Conozco muchas empresas en las que son los comerciales los que han cerrado los tratos de adquisición de equipos, líneas ADSL o equipamiento de red sin ningún criterio técnico, sino simplemente económico.
- En cuarto lugar, Pablo, cómo voy a abandonar un gestor de correo por un Gmail. El Webmail no puede ser el motor principal de nuestro correo, puede ser un excelente complemento y no comento nada de la versión offline porque lo que he probado no me ha gustado nada. Explico cual es la necesidad del correo interno y en este caso voy a ser didáctico. En una empresa, lo normal es que un 70% de los correos se muevan a nivel interno, por lo que no es necesario que el correo que voy a enviar a todos los departamentos pase por el servidor de Google para luego volver al de mi empresa y acabar en el despacho de al lado. Se puede gestionar perfectamente a nivel interno, con lo cual la información la tendremos más controlada tanto a nivel de seguridad como a nivel de operabilidad. Google también tiene problemas.
Con toda esta parrafada lo único que pretendo demostrar es que lo más cómodo para el usuario no tiene que ser necesariamente lo mejor a nivel empresarial. Y que ni siquiera un usuario avanzado va a considerar una serie de factores que un experto en el ramo tiene que valorar a la hora de tomar una decisión sencilla en el área de sistemas. Insisto en que el informático tiene que ser cuanto más didáctico posible para evitar malos entendidos.
Por último y para acabar me referiré al concepto de “informático”. Creo que Pablo ha hecho muy bien en diferenciar entre Técnico de Sistemas y Programador. Todos son ingenieros, pero un ingeniero de montes poco tiene que ver con un ingeniero naval. ¿Podría hacer el uno el trabajo del otro? Creo que la época del lampista, fontanero a la vez que electricista, hace años que acabó en este país, menos en el área de informática que lo mismo te piden reparar la fotocopiadora como la máquina del café, que al fin y al cabo también va enchufada.
Como conclusión te diré que un buen informático será un economista para la empresa, ahorrará recursos humanos y materiales y si comprobamos los sueldos que tienen ya te voy diciendo que no será mucho más costosa para la empresa que la reunión comercial que hacen en no sé qué hotel o crucero…
Foto | stoic
En Pymes y Autónomos | ¿Realmente necesitas un informático en tu empresa?