Las empresas se benefician del entorno económico y actualmente el español no parece ser muy propicio para los negocios. Por ello una gran cantidad de pymes están poniendo sus ojos en los países emergentes y cada vez son más las que abandonan nuestras fronteras. ¿A dónde van?
Los destinos preferidos son los que conforman el denominado BRIC, es decir: Brasil, Rusia, India y China, economías en crecimiento que, aunque radicalmente distintas a la española, al menos proporcionan una estructuras con muchas oportunidades y necesidades por cubrir.
Además, los menores costes laborales de estos países hacen que muchas empresas muevan a ellos una parte de su producción para poder competir en precios o reducir sus cargas económicas. Así en la India han aumentado increíblemente las actividades relacionadas con el outsourcing.
Nuestro país, situado entre los llamados PIGS (Portugal, Irlanda, Grecia y España), no ofrece un mercado atractivo para muchos de sectores como el de la construcción que, sin embargo, son muy demandados en otras naciones en desarrollo. Las oportunidades derivadas de la internacionalización de las pymes son evidentes pero sus problemas también lo son.
Enfrentarse a un mercado totalmente nuevo no es una labor sencilla y tenemos que destinar un tiempo a estudiar la estructura del país, sus leyes y costumbres. Puede ser apropiado apropiado pasar una temporada en el país destino antes de dar el salto para así conocer cómo funciona la competencia y buscar acuerdos de colaboración con entidades locales que presenten necesidades que podamos cubrir.
De los países comentados el que más complicado puede resultar es el Chino por la cerrazón de su gobierno, las diferencias culturales y lingüisticas y la forma de hacer negocios, muy basado en la confianza. Aunque otros países ya se han introducido en este país con éxito todavía hay gran desconfianza hacia España por mucho que veamos acuerdos o compras de deuda.
En esta nación encontraremos competencia alemana, inglesa y francesa que llevan mucho tiempo implantada y por tanto es uno de los mercados emergentes más complicados de abordar porque, además, los productos de éxito que podamos llevar serán fácilmente plagiados en China.
Salir de España no es una labor fácil pues requiere mucho tiempo y estudio ya que cada empresa y producto se enfrentará a problemas muy diferentes pero cada vez son más los deciden abandonar los PIGS para probar con los BRIC.
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