Según un estudio llevado a cabo por la empresa de trabajo temporal Randstad, el 69,8% de los trabajadores españoles confían en que sus oportunidades de empleo mejoren tras ser vacunados, el porcentaje más alto de Europa en lo que respecta a confianza en el impacto positivo de la vacunación en el mercado laboral. Pero realmente ¿encontrar trabajo será más fácil si estamos vacunados?
Esta tasa es 20,7 puntos porcentuales superior a la media europea (49,1%). La cuestión es saber si la percepción de más posibilidades de encontrar trabajo viene por el hecho de que ya nos han vacunado a nosotros, o porque al estar vacunada toda la población se vuelve a la normalidad y se inicia la recuperación económica.
Porque no solo se trata de que encuentren empleo aquellos que lo han perdido, sino de tener mejores perspectivas profesionales en el caso de aquellos que siguen trabajando. Además la llegada de los fondos europeos y la puesta en marcha de nuevos proyectos tendría que generar nuevas oportunidades laborales que supondrán movimiento también dentro de las propias empresas y trasvase de empleados entre diferentes organizaciones.
La parte negativa o que quizás muchos de los encuestados no han contemplado es que una vez iniciada la recuperación económica, aquellas empresas que han tenido trabajadores bonificados dentro de ERTE realicen ajustes de plantilla.. Las empresas están esperando a recuperar a todos los empleados que han estado en esta situación y después tendrán que esperar seis meses para poder despedir sin penalización. Será a partir de este momento donde realmente se pueda comprobar cual es el grado de recuperación y cómo afecta al empleo.
Porque si la recuperación es solida serán una minoría las que ajusten plantillas ya que se habrán recuperado niveles de facturación precrisis. Y el trabajo al final alguien tiene que hacerlo. En todo caso quizás la realidad del empleo si estamos vacunados sea más una cuestión de deseo que la realidad que nos espera. También es cierto que la recuperación de la economía tras otras crisis en España ha sido siempre más potente de lo esperado, más rápida, algo que fundamentalmente se debe a las características de las empresas españolas y el tipo de negocios que se ponen en marcha.
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