Si analizamos el informe sobre Estructura y Demografía Empresarial (PDF) publicado por el Instituto Nacional de Estadística, es inevitable deducir la precaria estructura empresarial española y cómo incide notablemente en el conjunto de la economía española.
El saldo neto de empresas que cesaron totalmente su actividad con respecto a las que se crearon hace que por cuarto año consecutivo el número de empresas activas en España haya disminuido. En 2011 esta diminución fue del 1,6% (391.270 cesaron su actividad y 334.516 la iniciaron) lo que situa el total de empresas activas en 3.199.617.
Si entramos en profundidad en los datos podemos ver que el 55,2% de la sociedades no tiene ningún empleado y otro 26,1% tiene uno o dos trabajadores. Es decir que más del 80% de las empresas tienen una estructura de mero autoempleo o de subcontrata, lo que las hace muy “poco resistentes” a una situación recesiva como la actual.
Por sectores, el 54,6% de la empresas españolas pertenece al sector servicios (incluida la hostelería), el 24,2% al comercio, el 14,5% a la construcción y sólo el 6,7% a la industria. Lo que evidencia el enorme desequilibrio del tejido económico de nuestro país y la necesidad de replantearse el diseño de nuestra estructura productiva.
Los datos son muy negativos y con esta perspectiva no parece que la recuperación económica y la creación de empleo pueda tener una base sólida en la que apoyarse. Podemos seguir confiando en que si se crearan dos millones de empresas y cada una empleara a un trabajador reduciríamos significativamente el paro. Pero desengañemonos, es imposible que en el escenario actual se aumente el volumen de empresas activas en esas cantidades.
La única manera de que esto se llevara a cabo sería con empresas con una fuerte estructura, que no dependan excesivamente de la demanda interna (cada vez más pobre) y con un mejor equilibrio de la aportación de cada sector. En este tipo de cosas es en las que deben trabajar nuestros dirigentes, tanto en la cantidad, en cuanto a la aparición de nuevas empresas, como en la calidad de las mismas.
En Pymes y Autónomos | Flash de la situación empresarial en 8 puntos
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