"Quiero que mi negocio se vea, que destaque, que haga ruido en Internet", es un discurso que algunas empresas mantienen como si la persona que está detrás de la pantalla fuera un mago, tuviera las veinticuatro horas disponibles, y los medios económicos de los que dispone Coca Cola. Por esta razón, dos creativos con mucho sentido de humor idearon esta página donde de manera muy ilustrativa muestran cómo 'hacer ruido' en Internet.
Si queremos que nuestra empresa sea conocida en redes sociales y en Internet deberíamos reflexionar antes de visualizar nuestra marca llegando a millones de usuarios. Es cierto que muchos gurús y los consabidos expertos en Social Media que jamás se han acercado al mundo del marketing o de la publicidad, prometen resultados imposibles de cumplir.
Seamos realistas y sobre todo selectivos. Por un lado como empresa que quiere estar presente en Internet no exijamos milagros, y por la otra parte, sería de agradecer que algunas promesas no se hicieran jamás, sobre todo si no vas a conseguirlo. Haces daño al cliente, a ti mismo y al sector.
-Paciencia. La prisa nos pierde. Si queremos resultados óptimos vamos a volver a pensar como antaño: paciencia y trabajo. La ley del esfuerzo está detrás de campañas exitosas. Los virales no son producto de una tarde loca en la que se te ocurre grabar un vídeo. Demos tiempo a las personas encargadas de gestionar nuestra imagen en la red.
-Inversión. Hoy día cualquiera puede ser Community Manager, se hace un curso y adelante, a abrir perfiles sin ton ni son. Este trabajo no es más que la evolución de un profesional del marketing o del publicidad, por supuesto de personas que han sabido formarse y saben ver más allá de los 'me gusta'. Llevar la imagen de una empresa es costoso. Hay que asumirlo. Tiempo, estrategia, creatividad, interactuar con los clientes-amigos, medir los resultados, etc.
-Coherencia. Si en Internet eres el mejor, cuando un cliente se acerque a tu empresa también has de demostrar que lo eres. Y viceversa. Organizaciones potentes, ven mermada su imagen y credibilidad todos los días al no poder solucionar problemas en el momento a través de una cuenta en Twitter. Canal, que por otro lado, han elegido como atención al cliente.
-Agradece y valora.Estar en las redes sociales a veces es sinónimo de ventas y en otras de fidelización hacia la marca, confianza, y sobre todo una mezcla de simpatía con solvencia. El encargado de gestionar la empresa no se limitará a mostrar su producto y su logotipo a diario (aburre) sino que mostrará esa parte en la que el lector pueda comprobar que es el mejor en su sector: con consejos, artículos propios, interés por su sector.
Hacer ruido en Internet se puede conseguir un día, dos, incluso durante un mes para luego caer en el olvido. Pensemos en marcas o servicios que siguen ahí, que han logrado un equilibrio dentro y fuera de la red. Se debe confiar en la labor de quien gestiona día a día una empresa no sólo por el número de fans sino por los comentarios y lugares donde se converse sobre tu marca o servicio.
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