Algunas empresas cuando realizamos un pedido online, no prestan mucho atención al embalaje de los productos. Sobre todo a las grandes superficies donde los clientes compran a través de la red la compra. Plásticos, cajas de cartón, etc. inundan nuestra casa cuando el pedido podría haber venido en bolsas para reciclar.
No solo se trata de comodidad a la hora de repartir (el cartón no es muy resistente) sino cambiar la abundancia de paquetes y envoltorios por un embalaje sostenible y que el cliente pueda volver a utilizar, sin olvidar que en él aparece el nombre de la empresa.
Es importante elegir un diseño apropiado de packaging
El 'vestido' que lleva nuestro producto será la primera imagen que te defina ante tu cliente. Debes escoger el tipo de material, la impresión, los colores, etc. Y sobre todo, pensar en qué será más beneficioso para quien lo recibe. Al fin y al cabo, la compra no es un producto de lujo donde el envoltorio sea importante por su atractivo.
Si se da el paso de comprar online la comida, lo que la persona desea es que llegue pronto y además que no suponga acumular basura cada vez que vacía una caja de productos.
El uso mínimo de material, es a lo que debería aspirar una empresa online
El cartón puede tardar un año en descomponerse. Las bolsas de plástico hasta veinte años, mientras que el vidrio tarda aproximadamente cuatro mil años, por citar algunos ejemplos.
Por esta razón resulta curioso que por un lado, nos inviten a que cuidemos del planeta cuando por el otro, las grandes empresas prefieren invertir en cartón que es económico en vez de por envases más ecológicos (y prácticos)
Anunciar que tu empaquetado está realizado de forma lo más natural posible, no solo ayudará a mejorar el impacto medioambiental, sino que también será un reclamo publicitario y podrás convertirlo en una economía circular, donde la inversión extra por los materiales ecológicos se verán recompensadas por un aumento en las ventas.
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