En determinadas ocasiones, nos asaltan noticias de determinados personajes famosos o famosas que no han resistido la presión del éxito y que a temprana edad o bien han arruinado su vida o incluso la han perdido. Ello que es así en el mundo de la farándula y demás, también lo es en el ámbito de muchos profesionales y empresarios de éxito de todos los sectores (aunque puede que no sea tan públicamente visible).
La verdad, es que supongo que no hay una receta mágica para evitar que quien del triunfar, hacer dinero o simplemente ser una persona conocida o proveniente de una familia reputada, hace de su vida una pendiente cuesta abajo y sin frenos, y (de atravesar un punto de retorno) con un sólo final. Como también supongo que no es un único factor lo que impulsa al profesional o empresario que ha tenido éxito a tomar esa deriva mencionada.
Pero una vez dicho esto, si que tenemos que tener muy presente una cosa. Podemos provenir de una familia con mucho dinero, podemos haber tocado la fama, la gloria y la riqueza con la punta de las manos e incluso podemos habernos bañado en ella, pero si todo ello no sabemos mantenerlo en orden dentro de nosotros, la deriva será inevitable.
Es muy fácil que se nos suban los humos por quienes somos, por quienes hemos sido o por provenir de donde provenimos. Pero si queremos terminar en una caja de madera antes de hora por habernos arruinado la vida y nuestro cuerpo no haber resistido, o por no haber soportado la presión y habernos pegado un tiro, bien haremos de tomar cartas en el asunto.
Si no queremos que suceda lo anterior, bien haremos de concienciarnos y formarnos además de en todas las carreras y másteres que podamos realizar, en una carrera personal, quizá la más importante, que no nos enseñara nadie más que nosotros: la carrera de aprender a gestionar nuestras emociones y cómo llevar el posible éxito o el peso de nuestro pasado. Entonces y sólo entonces estaremos en disposición de dirigir adecuadamente la más grande de las empresas y gestionar todos los ceros de nuestras cuentas bancarias.
En Pymes y autónomos | ¿Éxito? , ¡el éxito está en ti! Imagen | bisbi