Empieza a convertirse en una imagen habitual. Los taxistas toman las calles de Madrid para protestar por la normativa impulsada por Isabel Díaz Ayuso. ¿Qué gusta tan poco a los taxistas? En principio la libertad horaria para que trabajen cuando quieran, es decir, nada de descansar un día a la semana.
Creen que se está favoreciendo a las grandes empresas como Uber, Cabify o Bolt al 'invitar' al gremio del taxi a que trabaje 24 horas los 7 días de la semana. Tanto la Federación Profesional del Taxi de Madrid (FPT) y Élite Taxi Madrid, convocan estas manifestaciones.
Qué ofrece el nuevo reglamento a los taxistas para que sientan que son los perjudicados
Vamos a destacar los puntos más relevantes de la nueva normativa que se pretende aprobar durante el primer trimestre del año:
- Ampliación de 3 a 59 del número de licencias que puede poseer una persona, ya sea física o jurídica.
- Eliminar la obligación que tienen todos los taxis de librar un día entre semana.
Estas medidas no gustan al sector, significarían la liberación total y un acceso más fácil a la compra de licencia por parte de plataformas Vehículo de Transporte con Conductor (VTC)
Las VTC no planean hacerse con licencias de taxis para competir
En el otro lado, las plataformas VTC, declaran en el Confidencial no contar con ninguna licencia de taxi en propiedad. Y se defienden atacando con el dato de que son muchos los taxistas los que ofrecen sus servicios a través de sus aplicaciones.
Entre los años 2018 y 2019 hubo una larga lista de protestas y huelgas porque no se ponían límites a las aplicaciones VTC. Incluso el Tribunal Supremo consideró oportuno proteger al sector del taxi poniendo limitaciones a Uber, Cabify o Bolt.
El objetivo era equiparar los horarios de los servicios VTC con los del taxi. Si nos remontamos a 2014, basta para comprobar que estas empresas no lo han tenido fácil ante el gremio de los taxistas que nunca han visto con buenos ojos, lo que consideran una competencia desleal.
Estamos en 2023 y la lucha entre el taxi y cualquier normativa que beneficie a estas plataformas, implicará protestas hasta lograr que su trabajo no salga perjudicado.
Los taxistas no quieren ni oír hablar de descuentos en precios cerrados. Relacionan esta posibilidad con pérdidas y precariedad para su sector. Veremos qué sucede durante estos días porque están dispuestos a negociar.