El Gobierno ha anunciado hoy en el Consejo de Ministros un nuevo decretazo que entre otras cosas pretende reducir una de las prácticas más extendidas entre las empresas. Los contratos temporales tienen los días contados, o al menos, se busca penalizarlos de forma significativa en favor de los contratos indefinidos, al menos en lo que a cotización y coberturas sociales se refiere.
En concreto, se aumentará la penalización en la sobrecotización a la Seguridad Social para los contratos temporales de muy corta duración, igual o inferior a cinco días. En este tipo de contratos, la cotización por contingencias comunes se elevará hasta un 40%, 4 puntos porcentuales más de la situación actual, donde los contratos de menos de 7 días pagan un 36%.
Del mismo modo, el Ejecutivo ha anunciado que se modificará la Ley de la Seguridad Social para aplicar a los días efectivamente trabajados y cotizados el conocido como coeficiente de temporalidad, que permitirá al trabajador reunir un mayor número de días en alta para el acceso a las prestaciones de Seguridad Social.
Así, a efectos de acreditar los periodos de cotización necesarios para acreditar los derechos a jubilación, incapacidad permanente y temporal, muerte y supervivencia, además de los permisos de paternidad y maternidad, en los contratos con duración igual o inferior a cinco días, cada día de trabajo efectivo contará como 1,4 días de cotización.
La temporalidad, un mal endémico de la economía española
Esta modalidad de contrato que se ha duplicado en la última década, como consecuencia de la crisis económica y del propio modelo productivo español, basado en servicios y en necesidades concretas que duran unos pocos días. Ni la recuperación económica ha logrado contener uno de los mayores males endémicos de la economía española.
La tasa de temporalidad no ha parado de crecer año tras año, hasta situarse en el 26,8% de la población activa en el segundo trimestre de 2018, según la EPA, lo que nos sitúa como líderes europeos, casi doblando la media comunitaria que es del 14,3%.
El año pasado, el sector que aglutinó la mayor parte de contratos de menos de siete días fueron los servicios, con el 83% de los mismos, y este año cerrará con una ligera bajada del 1,8% con respecto a 2017.