Cuando una pyme se plantea la necesidad de centralizar sus archivos la primera opción que se suele utilizar es compartir carpetas en un disco duro, a ser posible un NAS. Uno del los inconvenientes de este sistema es que a veces necesitamos más funcionalidades que no podemos pedir a un disco duro de red. Es entonces cuando nos planteamos la posibilidad de adquirir un servidor, pero nos frena el precio y la necesaria administración del mismo. Windows Home Server es una buena solución para este tipo de empresas.
¿Dónde está la ventaja respecto a una versión de sistema operativo de servidor normal de Windows, ya sea 2003 o 2008? Pues principalmente en la administración del sistema. Es decir, al ser un producto orientado al consumidor doméstico es más sencillo de administrar que un sistema de gama profesional. Cierto que las opciones son más limitadas, pero a la vez nos permite gestionar un servidor que puede cumplir las principales funciones que requiere nuestra empresa sin necesidad de grandes conocimientos técnicos. Respecto a los precios en los que se mueven estos equipos pues la verdad es que están en una franja que oscila entre lo que nos puede costar un disco duro con funciones de red y un servidor de gama baja. Por lo general los precios de estos servidores parten de los 400 €. Está claro que no va a darnos la funcionalidad de un sistema profesional, pero si que podemos tener mucha más funcionalidad por un poco más de dinero que un NAS.
Si queremos fomentar más el uso de este tipo de servidor tenemos a nuestra disposición multitud de programas que pueden facilitarnos la tarea de administrar contenidos digitales, que van desde programas que nos buscan archivos duplicados y muchas más funcionalidades que le podemos añadir desde la página oficial de Microsoft en función de la necesidades que tengamos.
La gestión de las copias de seguridad de los equipos que acceden al servidor es otro de los puntos fuertes de este software. Es posible gestionar las copias de seguridad de forma sencilla de hasta 10 equipos. Por otro lado una de las cosas que más me gustan de este tipo de equipos y por lo cual lo prefiero a un NAS es la facilidad para ampliar el hardware llegado el momento, tanto para aumentar las capacidades de almacenamiento como de red.
Para su funcionamiento habitual no es necesario que disponga de un teclado y ratón ya que podemos administrarlo desde cualquier equipo de la oficina e incluso existe la opción de hacerlo a través de la nube, a través de nuestra página de acceso podemos subir o bajar ficheros tanto del servidor como de los equipos que están conectados. Por todo esto es mucho más recomendable instalar un servidor de estas características que un disco duro de red de gama alta, aunque muchos pensaréis que tal vez no necesitáis tanto.
La desventaja y por lo que no me acaba de convencer del todo este sistema es que no he encontrado ningún sitio en el cual nos digan si es posible tener más de 10 equipos conectados y si es posible ir adquiriendo licencias de cliente en caso de necesitarlas. Por eso parece que este sistema sitúa su ámbito de uso en estos 10 usuarios no siendo un sistema escalable al nivel que estamos acostumbrados en Windows Server, lo cual es lógico estando pensado para cubrir las necesidades del hogar.
En resumen y para ir concretando el uso que podemos dar a Windows Home Server en la empresa yo lo recomendaría para pequeñas empresas de hasta 10 usuarios, que necesitan más funcionalidad de la proporcionada por un disco duro de red pero no tienen los conocimientos técnicos para administrar un servidor ellos mismos. En este punto, el modo de administración de Windows Home Server es donde destaca por su sencillez. También es importante las ampliaciones de funcionalidades que podemos tener ya sea de hardware como de software así como su ajustado precio. En definitiva una buena opción para la pequeña empresa.
Más Información | Windows Home Server - Página oficial En Tecnología Pyme | Factores a tener en cuenta para elegir entre un NAS o un servidor