Cuando un gigante como Zara da un paso hacia el comercio online sin duda se produce un efecto contagio que hace que otros muchos se planteen lanzar también tiendas online. Tal ha sido el caso de Bimba & Lola o Desigual, que han aprovechado el ruido mediático del lanzamiento de Zara.com para poner en marca sus propias tiendas o anunciarlo. Y es que está claro que el lanzamiento de Zara.com y el efecto contagio serán el impulso definitivo para el comercio online.
El lanzamiento de la tienda de este gigante sin duda hará cambiar de hábitos a muchas personas. Se perderá el miedo a comprar por Internet. Este cambio cultural sin duda beneficiará a las pequeñas empresas que verán como sus clientes también aumentan por le efecto contagio. Si las grandes funcionan, en menor media lo harán las pequeñas, pero la barrera cultural del miedo a la compra online en gran medida se habrá vencido.
Y a la vez esperemos que cambien los modelos de distribución. Tendremos que poder gestionar la logística de manera que se acorten los tiempos de entrega de los productos. El valor del stock y del almacén en nuestras pymes debe ser menor. Debemos ser capaces de llegar a acuerdos para que el producto pase directamente desde nuestro proveedor hasta el cliente, siendo nosotros los garantes del mismo y la cara visible respecto al cliente.
Esta es una de las claves para tener éxito en el comercio online, que no está tanto en la bondad de nuestros productos, sino en los tiempos de entrega. Yo vivo en una ciudad pequeña. Cuando necesito algún componente informático, por ejemplo, el tiempo medio de pedirlos en una tienda es de una semana, si consigo que me lo traigan. Si compro por internet lo tengo en casa en un máximo de dos días.
Las pymes se beneficiarán del cambio de procedimientos que supondrán para el mundo de la logística también la incursión de gigantes del comercio en el sector online. Todo el sector se tendrá que mover por distintos criterio buscando maximizar beneficios mejorando la automatización de los servicios.
Si a esto le añadimos una política clara de devoluciones, que es otro de los grandes frenos culturales del comercio online, tendremos una gran parte de nuestra tienda online solucionada. Sólo nos quedan los aspectos técnicos, y aquí existen múltiples soluciones de las que hemos hablado y todas ellas muy válidas dependiendo del tipo de empresa que manejamos. Es hora de aprovechar el efecto contagio del lanzamiento de los grandes del sector.
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