Se acercan los días de vacaciones de la Semana Santa y los responsables de comunicación de muchas empresas se toman unos días de descanso. Sin embargo, las redes sociales no se toman ese descanso y el community manager no puede irse de vacaciones. Por lo menos vacaciones virtuales y tenemos que asegurarnos de que la red mantendrá una cierta actividad.
No me refiero a que nos quedemos pegados a nuestro puesto de trabajo. Las vacaciones son necesarias para poder desconectar mentalmente del trabajo y los responsables de comunicación de las empresas no son ajenos a estas necesidades. Pero ¿qué ocurre en un largo puente como el que nos ocupa?
Lo que si debemos hacer es programar entradas en las redes sociales o en los blogs corporativos. De esta manera mantenemos el contacto con las personas que no se han marchado de vacaciones o aunque lo hayan hecho siguen revisando su Twitter o sus RSS, por ejemplo.
Las entradas para realizar en vacaciones pueden ser de un tono más informal, propio de las fechas para que no sean demasiado pesadas o por el contrario podemos facilitar el punto de entrada a alguna cuestión que necesita más tiempo para que las personas que no salen de vacaciones puedan aprovechar las vacaciones, ya sea para leer un informe, un manual, etc.
Si somos de la reserva autónomos, o trabajamos en empresas pequeñas donde hacemos de todo, lo mejor es adoptar la primera vía. De esta forma mantenemos una actividad más ligada a nuestro ocio buscando relaciones con nuestra vida laboral. Lo importante sobre todo es no desaparecer cómo si hubieramos estado en una burbuja, cuestión que hoy en día con las herramientas que tenemos a nuestra disposición tiene difícil encaje.
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