La pandemia también se ceba con los mayores de 45 años y su posibilidad de encontrar empleo

Si antes de la pandemia, los hombres y mujeres de 45 años parecían un problema en vez de una solución para una empresa, ahora más. Mientras que el mercado laboral no acepte con normalidad que al cumplir los 39 años una persona no cae en un abismo donde deja de ser productivo y creativo, este problema se seguirá dando.

En redes sociales enfocadas a la búsqueda de empleo como Linkedin existen multitud de grupos formados por personas de estas edades. Se encuentran en un limbo porque alguien decidió que ya eran 'mayores' para trabajar cuando cada ser humano es único, y hay jóvenes de 30 años sin mucho que aportar en una organización.

¿El talento desaparece cuando cumplimos los 45 años?

Obviamente no. En pleno siglo XXI cuando la esperanza de vida es elevada, pensar que un hombre o una mujer con 45 años es poco menos que un anciano es un pensamiento erróneo y lleno de estereotipos.

En los procesos de selección, sobre todo en el ámbito creativo, se tiende a asociar a trabajadores con juventud, cuando no siempre va ligada con un mínimo de conocimientos o de interés.

Al igual que no todas las personas se casa y tienen hijos, tampoco todos nos comportamos igual al llegar a los 40. En manos de los responsables de Recursos Humanos está el saber detectar a un candidato que vaya a ofrecer algo más que un título, un master y pocas ganas.

La pandemia tampoco ha ayudado a que muchos contratos destinados a mayores de 45 años se cerraran.

¿Las empresas tienen miedo a romper los estereotipos al contratar a un trabajador de 45 años?

Apenas hay unas pocas ofertas en los portales de empleo dirigidas a estas edades. Si esta situación se normaliza, ¿cuándo será entonces el momento de estas personas? ¿O deberán montar su propio negocio?

Siempre hablamos de la precariedad del trabajo destinado a los jóvenes, pero al llegar a los 40 años, hay que estar atento a que no suceda nada que pueda provocar que pierdas tu puesto de trabajo.

La razón es sencilla, a partir de ese momento, sólo en las películas, como en la protagonizada por Robert de Niro: "Pasante de moda" se tira de la experiencia para dar ejemplo al resto de la plantilla.

Pero esto es la vida real y pocas veces vemos anuncios donde se precise de personas con un grado de experiencia en un área profesional. Al revés. El término "sin experiencia" es lo más preciado. ¿La razón? El sueldo será más bajo y el joven lo aceptará, así ha sido y así será.

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