Las Startups pueden obtener una ventaja inicial muy grande al compartir entorno de trabajo con otras startups. El intercambio de conocimientos entre las organizaciones es una gran conquista, sobre todo el poder compartir cuestiones que quizá se hayan solucionado con anterioridad por alguno de los partners. A medida que la empresa evoluciona y los fundadores se plantean la contratación de nuevos empleados, el desarrollo de la cultura de la empresa se convierte en fundamental. Mientras que grandes espacios compartidos parecen atractivos no fomentan la construcción de una identidad cultural propia por lo que es difícil concentrarse en las necesidades de la empresa.
Compartir espacio con una o dos empresas con culturas similares proporciona beneficios mutuos y ahorro de costes y es una gran solución para muchas empresas. La mayoría de los fundadores no saben lo grande que va a llegar a ser su negocio en los próximos 5 años, buscar una empresa similar con la que compartir espacio ofrece un mayor nivel de flexibilidad y limita significativamente el riesgo en comparación con un contrato de arrendamiento tradicional.
La clave para los fundadores es entender lo que importa en este momento y pensar en términos de soluciones dinámicas y flexibles. En los inicios conviene ser muy ágil y adaptable para que en el futuro arraigue la cultura empresarial y que esté alineada con los objetivos de la empresa.
En Pymes y Autónomos | Crear una empresa atractiva Imagen | Josh Hallett