Desde que el hombre es hombre, el trabajo, sobrevivir a las inclemencias del tiempo, a las guerras, a las enfermedades, y peligros de todo tipo han sido sus enemigos. En el siglo XXI los verdaderos supervivientes son los autónomos.
El humor no ayuda a resolver problemas, ni paga cuotas. Pero, por otro lado, sirve de válvula de escape para tanto estrés y quién sabe si como forma de denuncia, ya que la nueva Ley de Reformas el trabajo Autónomo, no ha traído tantas buenas noticias como se esperaba.
Autónomos, el musical ha conseguido que un tema del que todos hablan, se convierta en el leitmotiv de un espectáculo. Quizás no resulte divertido, pero los actores lo logran.
Más de una vez, hemos compartido las peripecias por las que ha de vivir un autónomo cuando se da de alta en el RETA, durante el inicio de la crisis económica que azotó España, emprender parecía la única salida.
Pero comenzar a trabar por cuenta propia no es sencillo y si la vocación no existe, y las trabas burocráticas y administrativas son muchas, ya tenemos a nuestro héroe. Normalmente a la fuerza.
Emprender, afrontar la relación con clientes peculiares, hacerse amigo de toda la jerga que acompaña al 'emprendedor-autónomo', vivir de cerca la experiencia de conocer a gurús que lo saben todo sobre todo, son los ingredientes para este musical que ha cosechado muchos éxitos.
En Pymes y Autónomos|Algo de humor para emprender
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