En Tecnología Pyme os hemos presentado varias de las opciones disponibles en la actualidad para trabajar directamente en la nube con nuestros documentos. Parece que es una tendencia ya imparable, sobre todo después de conocer los planes de Microsoft en este sentido con el anuncio de su solución de Office Online.
Por los datos que se manejan, es evidente que todavía estamos en pañales en cuanto a funcionalidad en este tipo de productos, y que las alternativas de escritorio son las que más popularidad tienen entre los usuarios. El uso de de opciones como Google Docs o Zoho todavía es minoritario, y se emplean en general para realizar tareas que podríamos describir como básicas.
Si además hablamos de documentos empresariales, la seguridad se convierte también en una traba. Nuestra confianza a la hora de poner datos en la red, por muchas garantías que nos ofrezcan, todavía está en niveles muy bajos, independientemente de que esta sensación esté o no justificada.
Entiendo que la apuesta de Google tira mucho y nadie quiere perder la oportunidad de entrar en este mercado, pero creo que existen otras aproximaciones que podrían tener mayor éxito en un plazo corto de tiempo. Apple lo aprendió a las malas con su iPhone. Cuando lanzó la primera versión del producto, se empeñó en que todas las aplicaciones de terceros debían ser aplicaciones web, sin instalación en el dispositivo. Transcurrido poco tiempo, tienen una estupenda tienda de software, envidiada e imitada, que está teniendo un éxito considerable, y todo debido a la presión de los usuarios. Querían aplicaciones nativas
Yo creo que en la mayoría de los casos lo que buscamos es poder acceder a los documentos desde cualquier lugar. Si accedemos desde un ordenador, probablemente tendremos instalado un software que nos permita trabajar con ellos con mayor comodidad que su versión en línea. Creo que esta solución mixta tendría mejor aceptación y, sinceramente, vista la calidad de nuestras conexiones y la funcionalidad del software disponible, es una alternativa mucho más práctica que la primera.
Como comentan en error500, quizá es demasiado pronto para sacar conclusiones sobre el futuro de estas soluciones, acaban prácticamente de despegar, pero no creo que lo hagan hasta que la experiencia de usuario que ofrezcan sea igual a la que obtenemos al trabajar con las aplicaciones de escritorio tradicionales y que, además, el alojamiento remoto ofrezca las garantías de seguridad y confidencialidad adecuadas para los entornos profesionales.
Vía | Error500