Está claro que la crisis no afecta a todos los negocios por igual. Unos pierden clientes y volumen de negocio y otros mejoran notablemente sus cifras. Esta cuestión la podemos ver con un ejemplo muy claro, como es el caso de los los cartuchos de tinta o tóner de nuestras impresoras. Antes de la llegada de crisis económica eran muchos más los que utilizaban elementos originales, pero ahora está claro que los consumibles de impresión son un negocio al alza.
Y esto podemos verlo sólo por la ubicación de estas empresas. En mi ciudad antes existían unas cuantas, que se dedicaban a esta actividad. Tenían su sede en polígonos industriales por lo general. Ahora además han surgido negocios que se ubican en calles principales de la ciudad, donde pueden captar un mayor número de clientes. Porque también ha cambiado su cliente objetivo.
Porque si hasta hace poco su cliente potencial era la empresa, dejando más de lado al usuario doméstico o la pequeña empresa, al disminuir la actividad empresarial se han lanzado hacia el público doméstico. Ahora podemos ver hasta anuncios en la televisión buscando a estos clientes. Y la verdad es que lo han hecho bastante bien, puesto que en algunos casos disponen de cargadores automáticos.
Buscan que sea el propio cliente el que lleve su consumible agotado y lo recargan automáticamente en unos minutos. El ahorro sobre un componente original es considerable, en torno al 50% dependiendo de la empresa donde compremos, pero no todo es ahorro.
Por mi experiencia, los cartuchos originales me han durado objetivamente más, es decir, consigo sacar un mayor número de copias con el original que con el reciclado. A la vez, el número de copias que me han salido mal, es bastante menor. Y aquí he de comentar que he probado con varios distribuidores distintos. Unos mejores que otros, pero está claro que ninguno iguala al original.
Por lo tanto existe ahorro, pero no tanto como nos publicitan. Además tenemos que considerar que el gasto de mantenimiento que debemos hacer con los cartuchos originales es menor que con los reciclados. Y llamar a un técnico para que nos haga una limpieza de la impresora puede acabar con el ahorro que nos ha generado el reciclado. Dependerá un poco de todo, marca, modelo, distribuidor, etc. Es cuestión de ir probando para encontrar lo más adecuado para nuestro negocio.
En Tecnología Pyme | Impresoras láser o de tinta: ajustando el precio por copia
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