El precio de mis servicios: la voluntad

El precio de mis servicios: la voluntad
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Voy a relatar una historia real que podemos leer en Ahorro Diario, blog de la casa en donde también escribo (últimamente poco) pero que nos deja una reflexión importante.

Mi compañera Nuria, nos cuenta cómo ha acudido al circo con sus hijos porque el reclamo del mismo era el precio, “Niños 1 euro, adultos la voluntad”. Al final le ha salido muy caro por los gastos extras que se originaron en la función que pudo presenciar. Ojo, gastos voluntarios, no obligatorios.

Como era de esperar, los propietarios del circo han mostrado su postura y disconformidad con el post de cabreo-rebote de Nuria (leer comentarios del post anterior), y la verdad que voy a partir una lanza a favor del marketing de precio abierto que lleva la familia que gestiona el Circo Parada, puesto que es una idea excelente para promocionar negocios en tiempos de crisis.

Este circo lleva a cabo una peculiar forma de cobros, en donde le cobra un euro a los niños que acuden al espectáculo y les cobra a los padres la voluntad, en donde cada adulto contribuirá al cesto que pasan por el circo en la medida de sus posibilidades, considere justo o simplemente quiera.

Mediante este sistema de cobro, podemos focalizar el núcleo principal de nuestro servicio a coste aleatorio pero podemos seguir manteniendo el margen de beneficio del resto de productos o servicios que ofrezcamos dentro de nuestro negocio. En el caso del circo, obviamente hay que pagar si se consumen palomitas, refrescos o se hacen fotos con los animales.

Extrapolar este tipo de prestaciones a otros sectores puede parecer complicado, pero no lo es tanto, sobre todo en las actividades de servicios. Hemos visto ya algunos ejemplos, los cuales he hablado en estas páginas como servicios de asesoria o asistencia técnica.

En el campo de la venta de productos, podemos llevarla por ejemplo a los bares, en donde muchos no ponen tapa y se pueden comenzar a poner tapas u ofrecer bandejas de productos para que nuestros clientes se sirvan las cantidades que consideren adecuadas.

Con este tipo de técnicas de marketing, siempre habrá un sector de personas, que bien abusarán de los servicios que ofrecemos a coste cero, bien se sentirán manipulados por la venta cruzada, pero el caso es simple. El servicio se ofrece a coste de voluntad y por el resto, nadie te obliga. ¿Os imaginais un taller de reparación de vehículos o una peluquería que cobre la voluntad por la mano de obra y el precio de los productos o piezas? Es una técnica comercial con mucho futuro. Estoy seguro.

Vía | Ahorro Diario
Imagen | Esparta
En Pymes y Autónomos | Virtual Pyme: asesoría online en donde tu pones el precio

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